Los grupos de WhatsApp de madres son ilegales (o casi)

No es nada nuevo lo de mi aversión a los grupos de WhatsApp en general, y a los chats de madres del cole en particular. No entiendo la utilidad y sí la tocada de pelotas sideral que son. Insisto en el estudio profundo de las “Listas de difusión”. No me extenderé porque ya lo conté todo aquí.
El caso es que ayer una amiga me cuenta que es ilegal que te metan en un grupo sin tu permiso. ALELUYA, GLORIA AL CIELO. Y es que tiene toda su lógica. Me incluyen en un chat con gente que no conozco y, de repente, esos individuos tienen mi número y mi nombre, claro. Yo lo veía muy bestia, ¿con qué derecho alguien me incluye en el grupito de fútbol, en el de 5º de Primaria? Yo lo dejé claro cuando me preguntaron (que fue todo un detalle porque en los coles anteriores te incluían y punto). SI NADIE VA A MORIR POR ELLO, A MÍ DEJADME DE CHATS, QUE BASTANTE TENGO CON LO QUE TENGO.
No he podido evitar los que crean para los cumples, qué le vamos a hacer. Con lo que yo soy, me da cosilla mandar este enlace, y mira que ahorraría pesadillas. Me voy a armar de valor y, en el próximo, lo adjunto, así como el que no quiere la cosa, con muchos iconos de corazones rosas y sonrisas y besos amorosos.
Pero ya está, ahora es ilegal, qué bien. Y me pongo a investigar sobre el tema y resulta que es solo en el caso de organismos públicos. O sea, si es el Ayuntamiento, no vale, pero si es el entrenador de fútbol, pues sí.
VAYA UNA MIERDA.
Y es que no solamente, con toda la libertad del mundo, te incluyen en una conversación de la que nunca pediste ser parte, es que encima se ofenden y, con la misma naturalidad con la que ellos te han incluído, tú haces mutis por el foro y te ponen a caer de un burro. ¿Alguien me puede contar qué explicación debería dar? ¿Alguien me ha explicado qué pinto entre esas gentes que no conozco? ¿Alguien me aclara qué tipo de maravillas van a aportar los chats a mi vida? Y no, no me vale lo de que así comentamos los deberes de los niños. Por ahí no paso. Si mi hijo se olvida los deberes que se quede en el recreo a hacerlos, o lo que vea el profe, que para eso está. Yo de aquí me piro, PERO YA.
Resumiendo mucho, yo lo que pido aquí, señores de las leyes y las sentencias y los datos, es que declaren ilegales e, incluso inconstitucionales, los grupos de WhatsApps forzosos. Que conste que a mí los de mis amigas no solo no me molestan, sino que me encantan. Qué haría yo sin esas fotos de tíos buenos, sin esos vídeos con barbaridades mil, sin esos selfies matutinos con los jetos totalmente desfigurados.

Pero eso es una cosa y otra muy diferente que te pregunten si los deberes de mates eran los de la página 17 o los de la 19.
Ah, por favor, señores Presidentes de las legislaciones, también prohiban la desubicación. O sea, si el grupo se ha creado para organizar saraos divertidos, karaokes, difusión de chistes y demás, que encarcelen al que hable de política, del tema catalán o de Trump.
A la trena pero directo.
Y hasta aquí mis peticiones al legislativo.
DE MOMENTO.
