Hasta los ovarios estoy de aguantar la mala educación de los niños ajenos. Y DE SUS PADRES.
Te lo cuento todo en mi blog hermano, Weloversize.
Comments (7)
Amparo
Sabias palabras reinita!!!! Yo tengo una cafetería y ni t cuento lo q tengo q aguantar!!!!!!
Raquel
Hombre, que un niño llore no hay manera de controlarlo y al que le moleste que se quede en su casa y así no le molestará
lasclavesdesol
También puedes sacarlo del restaurante hasta que se calme y así, los que no molesten podrán comer tranquilos. Es una idea. Revolucionaria y extraña, quizás…
Inma
Totalmente de acuerdo, Sol. Yo también soy madre de dos pollos, de 6 años y 21 meses. En una ocasión saqué de un restaurante al mayor porque estaba portándose mal, en “momento rabieta” y se fue a casa con su padre. Mano de santo. Nunca más ha vuelto a ser necesario. Y, por supuesto, si viajamos en tren, por ejemplo, me paso las horas de viaje corrigiendolos y enseñándoles a estar tranquilos, bien sentados y hablando bajito, sin molestar. Para eso, está claro que me paso todo el viaje alerta, pero consigo que vayan aprendiendo a comportarse y a respetar la tranquilidad de los demás. Porque yo también he soportado a niños maleducados por padres pasotas y es un soberano coñazo.
Un abrazo!
lasclavesdesol
Más para ti, querida.
Ana
Debe ser que Zara los atrae. En la cola estaba, cuando un tierno infante se me pone detrás y empieza a meter su paraguas chorreando entre mis zapatos. Fue genial cuando intentó abrirlo. Me volví y le dije que se estuviera quitecito y su madre,desaparecida hasta ese momento, saltó sobre mí cual leona diciéndome a gritos “¡Por Dios, que es un niño!”. Llámame loca, pero eso no le da derecho a incordiar al resto de la humanidad. Besos guapa.
Sabias palabras reinita!!!! Yo tengo una cafetería y ni t cuento lo q tengo q aguantar!!!!!!
Hombre, que un niño llore no hay manera de controlarlo y al que le moleste que se quede en su casa y así no le molestará
También puedes sacarlo del restaurante hasta que se calme y así, los que no molesten podrán comer tranquilos. Es una idea. Revolucionaria y extraña, quizás…
Totalmente de acuerdo, Sol. Yo también soy madre de dos pollos, de 6 años y 21 meses. En una ocasión saqué de un restaurante al mayor porque estaba portándose mal, en “momento rabieta” y se fue a casa con su padre. Mano de santo. Nunca más ha vuelto a ser necesario. Y, por supuesto, si viajamos en tren, por ejemplo, me paso las horas de viaje corrigiendolos y enseñándoles a estar tranquilos, bien sentados y hablando bajito, sin molestar. Para eso, está claro que me paso todo el viaje alerta, pero consigo que vayan aprendiendo a comportarse y a respetar la tranquilidad de los demás. Porque yo también he soportado a niños maleducados por padres pasotas y es un soberano coñazo.
Un abrazo!
Más para ti, querida.
Debe ser que Zara los atrae. En la cola estaba, cuando un tierno infante se me pone detrás y empieza a meter su paraguas chorreando entre mis zapatos. Fue genial cuando intentó abrirlo. Me volví y le dije que se estuviera quitecito y su madre,desaparecida hasta ese momento, saltó sobre mí cual leona diciéndome a gritos “¡Por Dios, que es un niño!”. Llámame loca, pero eso no le da derecho a incordiar al resto de la humanidad. Besos guapa.
Pues eso digo yo. Mil gracias, chata.